Rubio, que estuvo magistral durante los 35 minutos que disputó y puso de
pie a los aficionados de los Timberwolves presentes en el Target
Center, dio toda una exhibición de juego completo ante unos Spurs que se
vieron desbordados en todo momento por las genialidades del
internacional español.
Su compañero de equipo, el base
puertorriqueño José Juan Barea, fue el que mejor definió lo conseguido
por Rubio al decir que "era el primero de muchos que llegaran".
Rubio
anotó nueve de 17 tiros de campo y capturó diez rebotes cuando faltaban
9:14 minutos para concluir el partido y recibió una gran ovación de los
sufridos seguidores de los Timberwolves.
El base ruso novato
Alexey Shved también rompió la mala racha encestadora al conseguir 16
puntos y Barea llegó a los 17 tantos, mientras que los Timberwolves
conseguían 12 triples.
Rubio anotó también uno de cinco triples y
dos de tres desde la línea de personal, 12 rebotes fueron defensivos,
puso un tapón y perdió cuatro balones.
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